domingo, 3 de septiembre de 2017

El periodista Leo Hernández (La Pipigua), con quien tuve el privilegio de compartir en la redacción del diario Ultima Hora, era uno de los informadores más completos en este oficio encantador que influye para que haya más equidad  y menos oprobio,  principalmente  para  quienes no tienen el poder para defenderse.

El hecho de ser hijo único no siempre es lo mejor. Un hermano o hermana usualmente son necesarios para esos momentos difíciles, aunque sea para dar consuelo. Esto hizo que quien escribe  acordara ser la hermana que no tuvo La Pipigua.  

Cuando murió su hija Victoria, en plena juventud, lloré junto a él la pérdida de mi sobrina. En el aniversario del fallecimiento de la joven el año pasado, La Pipigua me escribió lo siguiente: “siempre estará conmigo, mi amada hija Victoria, que partió a los brazos del señor.

En fin, he perdido un hermano y me duele en el alma. Para mí fue un honor, aunque quizás no lo necesitaba tanto por su amplia prole, fungir como su hermana. Era más bien un decir, pero sentía por él gran aprecio y respeto.

 La Pipigua  era muy sui generis. Nunca le vi enojado, excepto en una ocasión en que fingió estarlo conversando muy seriamente con un señor que se presentó a la redacción  y no había forma de detener su “verborrea” para seguir trabajando. ¡Por fin! Cuando se marchó rio a carcajada como era su costumbre.

En fin, mi hermano Leo siempre será recordado por todos aquellos que le seguirán apreciando como si estuviera entre nosotros. Para mí fue un honor ser su hermana. Solo mueren quienes no son recordados. PAZ.

Por: Cándida Figuereo.



03-09-2017-

Fallece de un infarto el veterano periodista Leo Hernández “La Pipigua”

Santo Domingo.- Falleció esta madrugada, tras sufrir un infarto, el veterano periodista Leo Hernández (La Pipigua).
El deceso del comunicador se produjo en su residencia, cuando veía televisión y los restos serán velados este lunes en la funeraria Blandino, según se informó.
“La Pipigua” trabajó junto destacados políticos dominicanos entre ellos el profesor Juan Bosch, y en distintos medios de comunicación. Fue director de comunicaciones en la Secretaria de Estado de Finanzas, hoy Ministerio de Hacienda, en la gestión de Vicente Bengoa.
El fenecido periodista y escritor Lipe Collado, en uno de sus escritos había definido a “ La Pipigua” como uno de los comunicadores “más informados y relacionados”.
La muerte de Hernández es lamentada hoy entre la clase periodística, donde algunos excolegas lo describen como buen amigo y gran ser humano.
Tenía unos 15 hijos, entre ellos el periodista Fénix Hernández de éste diario. Estaba casado con la periodista Margarita Quiroz, editora de la sección Vivir del periódico Hoy.
Fuente: listindiario.com

sábado, 2 de septiembre de 2017

Un regalo mejor para Balaguer

Ayer recordábamos aniversario de nacimiento de Balaguer. Recordando el regalo mejor del canto de cumpleaños dominicano de la autoría del maestro Casado Soler, el mejor tributo que hoy pudiera hacérsele sería un PRSC fuerte para beneficio de la democracia dominicana, su nación y población.
Superar debilidades del reformismo de hoy requiere vencer desconfianza y subestimación de sus seguidores que ha provocado proliferación de facciones, fraccionamiento y dependencia a otros partidos.
Ello ha impedido que se hagan valer elementos fundamentales de la doctrina y praxis del reformismo que hoy resultan pertinentes y oportunos: disciplina fiscal, no recurrencia a endeudamiento, inversiones en infraestructura para estimular producción y generar puestos de trabajo, protección medio ambiente, identidad nacional, etc.
Al no predominar estos elementos otros esquemas políticos se imponen con la sagacidad propia de los hijos de las tinieblas: “lían fardos pesados y difíciles de llevar y se los cargan a la gente en los hombros…. Todo lo que hacen es para que los vea la gente ensanchando las filacterias y alargando los flecos de sus manto” Mt. 23.4 y 5.
Se necesita el resurgimiento de fuerzas políticas capaces de enarbolar la admonición de Cicerón, el célebre jurista y filósofo romano: “el presupuesto debe equilibrarse… la deuda pública debe ser disminuida, la arrogancia de los funcionarios… controlada… para no caer en la bancarrota. La gente debe aprender nuevamente a trabajar en lugar de vivir a costa del Estado”.
El partido más llamado a enarbolar estos preceptos dentro del actual espectro político dominicano es el PRSC: por sus fundamentos doctrinarios y por haberlos puesto en vigencia durante los 22 años que gobernó. Y de no hacerlo, entraría en una negación de sí mismo que preludiaría su extinción.
Para ello necesita retomar un discurso derivado de su ideología socialcristiana y avalarlo en sus experiencias; concienciar la ciudadanía mediante sistemática presencia mediática y en redes. E institucionalizarse ciñéndose rigurosamente a sus disposiciones estatutarias e implementando, como si las elecciones fueran mañana, la maquinaria electoral que otrora proporcionó notorios resultados.
Una maquinaria que debe partir de los 16,000 colegios electorales, como manda el artículo 15 de sus estatutos, incluyendo las filiales en el exterior que deberían dar ejemplo por gozar de autonomía financiera y seguir los demás pasos consignados en los estatutos hasta culminar en una Asamblea Nacional con delegados tan vigorosamente seleccionados como para sobreseer los frecuentes codazos dirigenciales.
Ese sería el mejor tributo a Balaguer y a la nación, porque brindaría alternativa política a las pretensiones de quienes se han subrogado la facultad de apropiarse para beneficio propio, de los recursos aportados y/o que pertenecen a todos los dominicanos por igual.